Plaza Pública Cadem publicó este domingo los resultados de su última encuesta y los números hablan de un emparejamiento en la cancha política chilena, de cara al plebiscito del 17 de diciembre próximo, en el que los votantes decidirán si aceptan o rechazan la propuesta de nueva Constitución.
Según el sondeo, la opción A Favor para el Plebiscito Constitucional (que apoya la derecha chilena) subió seis puntos (+38%), mientras que la del En Contra (avalada por la izquierda), cayó tres (-46%), llegando a la brecha más baja desde mayo pasado, única oportunidad en que aquellos que apoyaban una nueva Constitución superaron a quienes la reprobaban.
Sin embargo, el 16% de los encuestados aún se mantiene indeciso. Entre ellos, 24% probablemente votaría A Favor, 17% probablemente votaría En Contra, 15% probablemente no iría a votar y 44% no sabe o no responde.
Eso sí, independiente de cómo piensan votar, 38% (+6pts) cree que ganará la opción A Favor y 55% (-2pts) que ganará la opción En Contra.
La investigación, ampliamente difundida en los medios de comunicación chilenos, reveló además que el 51% dice que ha visto la franja electoral televisiva, 14 puntos menos que la franja del plebiscito del 4 de septiembre del año pasado.
En lo que respecta a la aprobación de la gestión del Presidente Gabriel Boric quedó en 30%, un punto menos que en la medición anterior, y la desaprobación se mantuvo en 65%.
El alza en las preferencias de la opción A Favor se debería, según el estudio, a la percepción que ha tenido la gente sobre la franja electoral televisiva, que partió el 17 de noviembre: la franja del A Favor es evaluada con nota 4,3 mientras que la del En Contra obtiene un 3,8. En este contexto, la primera logra comunicar mejor sus ideas (43% vs 30%), es más creíble (41% vs 26%) y es más transversal (41% vs 23%).
Corrupción
Las cifras que no logran repuntar son las que dicen relación con la imagen de las instituciones públicas chilenas, mayormente debido a los casos de sobornos y cohecho que salieron a la luz en lo que va del año.
Ante la pregunta “¿Cuán extendida diría usted que está la corrupción en Chile…?”, un 84% dijo que “hay mucha corrupción”, mientras que el 15% señaló que “hay algo de corrupción”.
Esta cifra evidencia que la percepción de corrupción en el país subió 14 puntos respecto de marzo del año 2015, fecha en que estalló el famoso Caso Caval, que involucró al hijo de la entonces presidenta Michelle Bachelet en una truculenta trama financiera y dio por el suelo con la popularidad de la mandataria.
En esa línea, las instituciones donde se percibe mayor grado de corrupción son los partidos políticos (81%), el Congreso (67%), las municipalidades (59%), la ANFP (Asociación Nacional de Fútbol, 58%) y las fundaciones u ONGs (55%).
Luego se ubican los Tribunales de Justicia (46%), las empresas públicas (45%), el SII (Servicio de Impuestos Internos, 43%), los medios de comunicación (41%), la Fiscalía (41%), las empresas privadas (39%), Carabineros (30%), Contraloría (30%), la CMF (Comisión del Mercado Financiero, 28%), las Fuerzas Armadas (23%), la PDI (Policía de Investigaciones, 17%) y el Registro Civil (11%).